jueves, 9 de junio de 2011

TODOS DEBEMOS DEFENDER A WIRIKUTA

MÁS SAQUEOS DEL PATRIMONIO DE MÉXICO:
LA INDIGNA CONCESIÓN MINERA DE LA SAGRADA WIRIKUTA

En 2008 el presidente de México se vistió de wixárika -huichol-, y prometió “fortalecer la continuidad histórica de los lugares sagrados” de la nación Wixárika, que habitan desde hace miles de años, en territorios ahora bajo el control de los estados de Durango, San Luís Potosí, Nayarit, Jalisco y Colima. Pero en los hechos hay otras realidades: Se han dado concesiones en diversos lugares de México a compañías mineras que muy poco dejan al país, y en el caso de Wirikuta, tierra sagrada wixárika, a una empresa canadiense, First Majestic Silver Corp.

Las Antiguas Naciones de México fueron invadidas por españoles y luego dominadas por el gobierno de un nuevo Estado llamado México, que ha tenido varios gobiernos a partir de golpes de Estado, dictaduras, guerras y acciones violentas, que siempre se han impuesto sobre los antiguos pueblos que aquí viven desde hace miles de años, y a quienes debemos beneficios enormes como la invención y mejoramiento del maíz, el cacao-chocolate, aguacates, tomates, chiles y muchos productos más que antes no existían y de los que todos nos beneficiamos. Los actuales gobiernos y muchas empresas privadas, reciben grandes ingresos por las visitas de turistas extranjeros a ciudades y obras de los ancestros de estas antiguas naciones, mientras a nosotros no se nos beneficia y solo somos despojados, a veces hasta del derecho de visitar nuestras antiguas poblaciones.

Muchos jóvenes y adultos mexicanos mestizos o criollos, algunos con altos grados de educación, no conocen sin embargo a su país y menos comprenden a las antiguas culturas y su gente, que todavía vive gracias a su propia capacidad, hablando sus propias lenguas, además del español que se les impuso. Y creen que esas naciones, a las que llaman indios, están formadas por gente primitiva, inculta y que no es productiva, además de negarse a la productividad y el progreso que ellos creen promover trayendo a negociantes extranjeros para rentarles a los hijos de México y permitirles llevarse nuestros recursos naturales para su ganancia casi exclusiva. Ese desarrollo económico “moderno” y sus manejos del Estado mexicano, no han traído más que desgracias, pobreza, y más violencia cada día, pero ellos consideran justo y aceptable enriquecerse con esas actividades, a costa de la mayor pobreza de las mayorías, al despojarlas de sus derechos, tierras, recursos, cultura y vida.

Las formas de comprensión del mundo y de la vida entre las Antiguas Naciones de México son muy diferentes a veces de las de los mexicanos y gente de cultura “occidental”, y en ocasiones no pueden comprenderlas al utilizar términos diferentes que no pueden ser traducidos siquiera a otras lenguas. Los espacios, lugares, territorios, regiones, seres, entidades vivas, conceptos, relacionados con sus prácticas “religiosas”, son muy diferentes a los de los occidentales: Nosotros tratamos más directamente con realidades vivas y no solo con símbolos; las ciudades, pirámides y edificios antiguos eran utilizados sobre todo por fuera, a cielo abierto, mientras que los españoles construyeron templos para estar dentro, dejando así siempre fuera a los “indios”.

Vender y rentar a extranjeros el derecho a destruir regiones geográficas para sacar elementos que consideran riqueza y que les dan ganancias y poder, es como vender y rentar los templos cristianos católicos para que escarben en ellos para sacar tesoros y llevárselos. Es algo que ningún mexicano aceptaría. Pero en cambio, el gobierno federal, a pesar de las promesas del presidente de México, ha dado permisos abusivamente para que se destruyan los lugares sagrados de los Wixrárika por una compañía extranjera.

Las autoridades Wixárika han informado que la Dirección general de Minas y la Secretaría de Economía otorgaron 22 concesiones para explotar 6,326 hectáreas, a pesar de que la zona está considerada Área Natural Protegida.

¿Por qué no dan concesiones para excavar en las catedrales de México, Puebla y los estados, en el templo de Santo Domingo en Oaxaca, en el de Tepozotlán y en la catedral de Morelia, región natal del presidente actual?
 
Para los pueblos antiguos hay elementos “naturales” que son precisamente reliquias sagradas con derechos propios, igual que los mexicanos de cultura europea-cristiana consideran patrimonio nacional y reliquias de su religión las esculturas, cálices, pinturas y otros objetos en sus templos. Nunca aceptarían que alguien llegue a robarlos y gastan dinero de todos en conservarlos y protegerlos, dentro de esos “templos” y en museos.

¿Por qué entonces no pueden reconocer los valores sagrados de las Antiguas Naciones de México? Parece que la ambición los ciega y venden los patrimonios de su tierra. 
  
Por las anteriores experiencias, es bien sabido que en los lugares donde se han dado ese tipo de concesiones mineras, se han generado graves problemas por la destrucción del hábitat natural y la contaminación con sustancias muy tóxicas que envenenan ríos, arroyos y fuentes de agua potable, generando graves daños a plantas, animales y humanos, cuando a la vez dejan muy pocos beneficios a la población; y cuando se van, dejan pueblos fantasmas como los miles que han quedado en todo México en esa fiebre delirante de hacerse ricos con la minería, que solo ha destruido la vida de miles de personas en esclavitud y trabajos mal pagados, problemas de salud y pobreza por la destrucción del medio ambiente.

Solo los funcionarios que dan y apoyan esas concesiones parecen beneficiarse de la llegada de esos “inversionistas” extranjeros. Es la única razón que explica que el Administrador de las áreas Naturales Protegidas del gobierno federal, Pedro Medellín Milán, y que el director de la llamada Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas -nombre que nos ofende-, la CDI, Javier Abreu Sierra, en vez de ayudar y proteger a la nación Wixárika, envía a sus empleados .pagados con dinero de todos- a tratar de dividir a nuestras comunidades para tratar de hacerlos aceptar esas concesiones ilegales, apoyándose además en el programa Vivir Mejor que se supone es para ayudar a la gente, pero aquí es instrumento de nuevas violaciones a las leyes, abusos y violencia legal y económica, política y social, cultural y aún policíaca, contra la nación Wixárika.

La revista Proceso, en su reciente número 1805 del 5 de Junio de 2011 presenta un amplio reportaje sobre el tema, con las declaraciones de Iván Guzmán, del Frente por la Defensa de Wirikuta, y de Tunhuari Chávez, geógrafo ambiental, que presentan pruebas y estudios de investigadores y universidades donde se plantean los graves daños a la ecología por esas explotaciones mineras irracionales.

Parece que la ambición ciega desmedida, que no considera a las demás personas, sigue dominando a quienes se ostentan como autoridades de una nación, basada en la invasión, el despojo y la ilegalidad desde los tiempos de los primeros conquistadores. Y como las empresas hacen regalos y benefician a otras empresas, sobre todo las de comunicaciones, nadie habla de estos asuntos en los medios de comunicación, todos callan las quejas y protestas, que nunca son atendidas por las autoridades, como debieran, y solo insisten en seguir diciendo, y creyendo, que los antiguos pueblos de estas tierras, de los que siguen comiendo, son ignorantes que se oponen al “progreso”.

El 13 de Abril de 2008 el presidente de la república, Felipe Calderón, al iniciar el programa Vivir Mejor en Pueblo Nuevo, Durango, firmó el acuerdo Hauxa Manaká por el cual los gobernadores de Jalisco, San Luís Potosí, Durango y Nayarit se comprometieron a resguardar y proteger los sitios ceremoniales milenarios de los wizrárika; y dijo: “Nos comprometemos a proteger y fortalecer la continuidad histórica de los lugares sagrados y las rutas de peregrinación del pueblo Wixárika”.

Pero todo son palabras huecas, parece, en lo que siempre dicen. En la realidad, han vendido su patria a extranjeros y les apoyan para destruir la tierra de los mexicanos y sus culturas milenarias, por obtener dinero para sus ambiciones personales, pues nunca se ve que hagan obras que realmente beneficien a los mexicanos, y menos aún a las Antiguas Naciones de México, a las que continúan despojando en nuevas formas con apariencia de honestidad, decencia y legalidad.

Pedimos a todos que, dentro de sus posibilidades, ayuden a impedir que esas compañías extranjeras, utilizando a mexicanos como manos rentadas mercenarias, vayan a destruir y dañar esas regiones sagradas y afectar no solo a los wixárika, sino a todos los mexicanos y la humanidad. Ya en San Luís Potosí, en el cerro de San Pedro, se logró detener otra de esas explotaciones mineras irracionales, indignas y suicidas.

Aquí presentamos, anexas, en sus propias palabras, las justas reclamaciones de las autoridades wixárika.

Antiguas Naciones de México.
9 de Junio de 2011.
      
CARTA DE AUTORIDADES DE LA NACIÓN WIXÁRICA
AL PRESIDENTE DE LA FEDERACIÓN DE MÉXICO

Al Presidente de los Estados Unidos Mexicanos Felipe Calderón Hinojosa
A los pueblos y gobiernos del mundo
P R E S E N T E




Venimos personalmente de la Sierra Madre Occidental a entregarle esta carta urgente para que haga valer su palabra que públicamente emitió donde se comprometió a respetar y proteger nuestros lugares sagrados en el pacto de Hauxa Manaká en el año 2008 y como le corresponde hacerlo según las leyes máximas de nuestro país y los acuerdos, decretos, pactos y convenios nacionales e internacionales que el Estado Mexicano ha suscrito para garantizar el respeto a nuestra cultura viva y de raíz milenaria.


Somos una comisión de autoridades agrarias y tradicionales del pueblo wixárika, que juntos somos el Consejo Regional Wixárika en la Defensa de Wirikuta y traemos la palabra que reúne el sentimiento de los consejos de ancianos, de los sabios cantadores, de los jicareros encargados de sostener el arduo trabajo de más de 500 centros ceremoniales comunitarios y familiares, traemos la palabra que junta en una misma firmeza el sentimiento de las familias enteras de todas las comunidades en Jalisco, Nayarit, Durango y Zacatecas donde habitamos los Wixaritari y queremos que nos responda respetando nuestro derecho como usted se comprometió.

El gobierno federal de nuestro país otorgó 22 concesiones que abarcan más de 6 mil hectáreas en la sierra de Catorce a la empresa minera First Majestic Silver Corp.- Real Bonanza, S.A de C.V.. Pero la sierra de Catorce toda y Wirikuta entera, señor presidente, es uno de los altares de mayor importancia donde nuestros peregrinos acuerdan la fertilidad y el equilibrio del mundo y de todas sus criaturas y tenemos evidencia de que la operación minera afectaría de forma profunda la ecología de la zona contaminando y desecando nuestros manantiales sagrados.


En estos tiempos de violencia extrema en nuestro país, que están acabando con los tejidos sociales, con este megaproyecto están secuestrando y quieren asesinar a nuestra madre, La Tierra a la que tienen amagada, y buscan la desaparición forzada de todo un pueblo, el Pueblo Wixárika.


Por eso le exigimos que cancele inmediatamente esas concesiones y cualquier otra que tenga como fin sacar minerales o destruir Wirikuta de cualquier otra manera, pues si el objeto de toda esta tragedia es el dinero, con firmeza le informamos que será infinitamente más barato sacar a esta empresa que lamentar la tragedia ecológica, espiritual y social que puede provocar escarbar y sacar las entrañas de Wirikuta.


Wirikuta es el corazón de nuestra esencia. Si se acaba, nos morimos como pueblo. Tenemos miles de años peregrinando a Wirikuta y conocemos por sus nombres a los antepasados que viven en cada loma, pedregal, peñasco, en cada flor, tenemos por ello según los estándares internacionales el derecho de posesión tradicional ancestral. Respetamos sin embargo, a las comunidades y ejidos campesinos que viven en la zona y rezamos también para que ellos siembren y cosechen su alimento, para que vivan bien, cuiden y sean protegidos por esa tierra sagrada cuya vocación no es la minería sino el alumbramiento y la renovación del corazón del mundo.

Vemos con mucha preocupación que a pesar del referido Pacto de Hauxa Manaká y de la pública oposición de nuestro pueblo a la operación minera en Wirikuta, usted ha guardado un silencio inexplicable ante nuestro reclamo, han sido violados nuestros derechos territoriales, también el que tenemos al consentimiento previo, libre e informado, además de que de llevarse a cabo dicho proyecto minero se violentarán las leyes ambientales de nuestro país porque la zona es un Área Natural Protegida por Decreto Gubernamental con su plan de manejo.

Los fundamentos legales de nuestro reclamo son en primer término el convenio 169 de la OIT, en sus artículos 2, 6, 7, 14 y 15; de igual forma en el artículo 2 apartado b fracción IX, artículo 27 fracción VII, segundo párrafo de la Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos y demás leyes relativas.


Nos preocupa más aún, que algunos operadores del gobierno federal y la propia compañía minera están tratando de convencernos de que aceptemos a la mina a cambio de que nos otorguen uno de los lugares sagrados que conforman el extenso de Wirikuta, el Cerro Quemado o Raunaxi. Ya explicamos que la sierra de Catorce es una unidad donde viven desde el suelo hasta la cima y en todo su interior la fuerza energética espiritual de nuestros ancestros que permiten nuestra vida ahora y en lo porvenir y la extensión que más coincide son las más de 144,000 hectáreas del área natural protegida. No aceptaremos por ningún motivo que se desarrollen este tipo de actividades en la zona pues es un agravio demasiado grande para nuestro pueblo, para México y para toda la humanidad, además de las ilegalidades evidentes que significan estas concesiones.

Señor presidente, somos originarios de este país, somos la raíz antigua y reiteramos: No nos destruyan la cultura wixárika, no se destruyan ustedes mismos por ignorancia de no saber lo que contienen esos valles de Wirikuta y esa sierra donde se ilumina el mundo.


Por eso venimos hasta acá en comisión a entregarle este escrito. Le damos a usted a tiempo nuestra palabra urgente. Somos cantadores peregrinos, sembradores, somos autoridades legítimas de nuestro pueblo de maíz venado y sol. Somos mexicanos y nos vestimos de flor porque cantamos la paz.

Cancele usted la minería en Wirikuta, eleve a rango federal su protección ambiental y cultural y todas las descendencias se lo agradecerán, de lo contrario, las generaciones presentes caminaremos un camino difícil pero firme en la convicción de detener esta amenaza, quedamos al pendiente de su respuesta formal en su carácter de Jefe del Ejecutivo Federal y responsable principal de la política económica, ambiental y social del país.

Pampariyutsi.

A T E N T A M E N T E
México, D.F. a 9 de mayo del 2011

“CONSEJO REGIONAL WIXARIKA POR LA DEFENSA DE WIRIKUTA ”

Por Waut+a y Kuruxi Manuka- San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños, Jalisco
Octaviano Díaz Chema

Presidente del Comisariado
José Guadalupe Serio de la Cruz

Gobernador Tradicional
Por Tuapurie- Santa Catarina Cuexcomatilán, Jalisco
Juan Torres González

Presidente del Comisariado
Julio de la Cruz Carrillo

Gobernador Tradicional
Alejandro Carrillo Enrique

Presidente del Consejo de Vigilancia
Por Uweni Muyewe- Bancos de San Hipólito, Durango
Santos de la Cruz Carrillo

Presidente del Comisariado
Angelita Aguilar de la Cruz

Gobernador Tradicional
Por la Unión Wixárika de Centros Ceremoniales de Jalisco, Nayarit y Durango
Felipe Serio Chino
Secretario

Carta como apareció en Taller de Música Popular El Cántaro:
http://tallercantaro.blogspot.com/2011/05/carta-urgente-del-pueblo-huichol.html#more

LA TRAICIÓN A LOS HUICHOLES. Artículo en Proceso, No. 1805, del 5 de Junio, 2011 se encuentra aquí:

www.proceso.com.mx/rv/modHome/buscar/1